Desde finales de los años 80, muchos bailarines han abandonado Senegal para encontrar una vida mejor en Europa. La mayoría son hombres, pero algunas mujeres, como Hélène, también consiguen hacer carrera a este lado del Mediterráneo. A través de palabras y movimientos, Hélène cuenta cómo superó las dificultades de la emigración y construyó su mentalidad de «luchadora». Sola, con sus amigos o con sus alumnos, avanza en las etapas de su vida de bailarina y comparte su irreprimible necesidad de bailar.